Alejandro Guzmán Roldán

Hola! Soy profesor de piano desde hace más de 30 años, les pongo aquí una breve reseña acerca de mi. Un cordial saludo.
Como todo pianista empecé mi formación en edad preescolar. Primero bajo la enseñanza de mi hermana mayor Alba Guzmán y posteriormente en los conservatorios “Padre Sojo” y "Juan José Landaeta” de la ciudad de Caracas, Venezuela.
Desde los 15 años hasta los 22 años fuí alumno de la pianista norteamericana Harriet Serr. Quien fue alumna y asistente en el Curtis Institute of Music de la célebre Isabelle Venguerova, fiel continuadora de la tradición de Anna Nikoláyevna Yésipova y Theodor Leschetizki.
A la edad de 18 años gané el “Segundo Concurso Jóvenes Solistas (1985)” que organizaba la Orquesta Sinfónica Venezuela. En esa temporada toqué como solista el concierto Nº1 de Tchaikovsky y de Khachaturian, con las orquestas Sinfónica de Venezuela (Teatro “Teresa Carreño”) y Sinfónica de Maracaibo (Teatro “Bellas Artes”), bajo la dirección de Isaac Karabtchewsky y Havid Sanchez.
Por razones y circunstancias personales no me he dedicado a la vida concertística sino a la docencia. Empecé a enseñar a los 16 años de edad.
Piano Kalligrafía surge como respuesta a mi convicción de que los beneficios de la escritura a mano nunca serán superados por la tecnología digital. No estoy en contra de las App y editores de partituras digitales, todo lo contrario, yo soy el primero en usarlos, pero sólo como herramientas complementarias. Se ha comprobado cómo la escritura a mano pone en funcionamiento y profundiza áreas del cerebro donde el pulsar una tecla o pantalla no puede. Esto ocurre al escribir cualquier idioma, la música es un idioma también con su escritura y gramática por decirlo de alguna manera.
La lectura del pentagrama la ejercitamos tanto en la práctica del instrumento como escribiendo en el pentagrama, ambas se retroalimentan, de ahí su importancia.
Espero que mis cuadernos de actividades sean de ayuda para profesores, alumnos y amateurs en general.